Director de Arqueología UACh: “Necesitamos reinterpretar nuestras historias y formar a nuevas generaciones”

Bajo el título “Necesitamos (…) formar a nuevas generaciones para que se apropien de esas historias”, en la página Binacional de Museos Patagonia Sur se da a conocer entrevista al Dr. Simón Urbina, Director de la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile y su visión del patrimonio en Chile.

El Director de la Escuela de Arqueología y docente de la Universidad Austral de Chile en su Sede Puerto Montt, Simón Urbina, es especialista en etnohistoria andina. Posee una gran experiencia en estudios relacionados con las primeras ocupaciones humanas en Valdivia y Osorno. Además, trabaja en Magallanes excavando los restos de la ciudad Rey don Felipe, uno de sus últimos trabajos que compartirá en el X Encuentro Binacional de Museos.

– ¿Podría hacer una pequeña introducción de lo que nos presentará en el encuentro?

– Voy a presentar los últimos avances en la investigación arqueológica, histórica y patrimonial del sitio desde 2019 a la fecha. Hay varias sorpresas y el reconocimiento de los aportes de muchas y muchos magallánicos que desde mediados del siglo XX han estado interesados en que el sitio arqueológico sea preservado y conocido mundialmente.

– Desde su punto de vista, ¿por qué es importante estudiar arqueología en Rey don Felipe? ¿Qué preguntas hay hoy por resolver en el sitio histórico?

– Es importante, pues, Rey Don Felipe fue la ciudad más austral de todo el orbe en el siglo XVI, proyectada por la Corona española a fines de 1580 con el objetivo de controlar el estrecho de Magallanes. Felipe II, rey de España en aquel entonces, libraba una guerra con los Países Bajos e Inglaterra, dos potencias navales que acechaban continuamente sus colonias. Hay nuevas preguntas como ¿Cuál es la historia de esa localidad más allá de la ocupación hispana?, ¿Cómo fueron las relaciones interculturales en este espacio?

– ¿Qué piensa sobre la relación que tenemos los chilenos con nuestro patrimonio? ¿Es una relación de respeto o es una constante necesidad de reinterpretar la historia? ¿Cómo es esa relación?

– Creo que esa relación se está reformulando a partir del interés ciudadano, del aumento de las investigaciones arqueológicas y la colaboración de las universidades, museos, entidades privadas que administran áreas protegidas de alto valor patrimonial, como el Parque del Estrecho. Es sin duda un síntoma de un cambio de foco y de forma de relacionarnos con nuestro patrimonio. Por supuesto, necesitamos reinterpretar nuestras historias y formar a nuevas generaciones (soy profesor en la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile, Sede Puerto Montt) para que se apropien de esas historias al igual que todos los habitantes del país.

– Vivimos tiempos de pandemia mundial ¿Qué desafíos le impone esta condición a su labor?

– Principalmente la docencia online ha sido una transformación adaptativa muy grande, que ha requerido de un esfuerzo y flexibilidad significativa. Por otra parte, la realización de estudios de campo o terreno ha sido muy complicada, por las cuarentenas y los permisos. Debemos trabajar en protocolos que aseguren la continuidad de los proyectos de investigación arqueológica, minimizando los riesgos sanitarios.

– ¿Cómo calificaría el aporte al conocimiento de los encuentros museológicos?

– Me interesa compartir y aprender de todas y todos los colegas que asisten. Espero puedan asistir estudiantes de arqueología, antropología, turismo y patrimonio de las universidades del sur austral de nuestro país.

El X Encuentro Binacional de Museos se desarrollará de manera virtual los días tres y cuatro de diciembre, por medio de la página web www.binacionaldemuseos.com y redes sociales del evento, que es financiado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través de Fondart Regional 2020.

Región de O”Higgins: Nuevo sitio arqueológico confirmaría presencia humana de hace aproximadamente 13 mil años

El proyecto “Tagua Tagua Milenaria” finalizará en pocos días su primera etapa de trabajo en terreno, que considera dos semanas de excavación y recolección de fósiles en la antigua Laguna de Tagua Tagua, una extensa área arqueológica de importancia mundial, ubicada a 140 kilómetros de Santiago.

En esta primera fase, a cargo del arqueólogo de la UACH, Rafael Labarca, el grupo multidisciplinario ha evidenciado la existencia de asentamientos humanos de la época de transición del Pleistoceno-Holoceno. Esta importante evidencia científica permitiría confirmar algunas hipótesis sobre los modos de vida de los primeros humanos en Chile y la extinción de la megafauna presente en el lugar, transformándose en uno de los sitios arqueológicos más importante del continente, abriendo nuevas perspectivas a la investigación científica mundial.

Nuevo sitio arqueológico confirmaría presencia humana de hace aproximadamente 13 mil añosEl paleontólogo e investigador postdoctoral de la Universidad de O’Higgins, Erwin González, a cargo de la segunda fase de análisis en laboratorios nacionales y extranjeros, revela que la evidencia de un poblamiento temprano convierte a Tagua Tagua en un laboratorio natural excepcional para la investigación científica mundial, “Tagua Tagua es el sitio con la mayor biodiversidad animal del pleistoceno de Chile, lo cual permitió que la laguna se posicione como un gran eco-refugio para los humanos, al menos desde hace más de 13 mil años”, detalla el investigador, agregando que además de la importancia para el mundo científico “este hallazgo debe aportar a la ciencia, a la investigación escolar y universitaria, y al desarrollo de un polo de turismo científico y patrimonial que impacte positivamente en el territorio”.

El patrimonio científico local, entendido como todos los saberes que surgen de la ciencia y que son parte de la cultura de un territorio, es uno de los pilares del proyecto. Bajo esa premisa el Vicerrector de la Universidad de O’Higgins, Marcello Visconti, enfatiza en el compromiso de la Academia por la puesta en valor del patrimonio científico. “Nos encontramos en un lugar que podría dar respuesta a una infinidad de preguntas y que alberga información valiosísima de nuestro pasado, que podría explicar el presente y proyectar el futuro”, señala el vicerrector.

En tanto, Rodrigo Verschae, Director del Proyecto Asociativo Explora O’Higgins, aseguró que “Tenemos una tremenda responsabilidad de visibilizar la continuidad de un trabajo que se viene realizando hace más de 70 años, iniciado por grandes investigadores como Ignacio Domeyko, Lautaro Núñez y Julio Montané, y que hoy la ciencia permite analizar con tecnología de punta y nuevas perspectivas, y de esta forma ayudar a explicar la evolución del hombre y las especies”, agregó Verschae quien además señaló que parte de esta investigación se puede conocer en el Documental “Tagua Tagua Milenaria” recientemente estrenado en el Festival de la Ciencia O’Higgins 2020, disponible en redes sociales de Explora O’Higgins.

En los próximos meses comenzará la fase de análisis de evidencias en laboratorios de la Pontificia Universidad Católica y otros centros de investigación en Estados Unidos, España y Nueva Zelanda gracias a convenios de colaboración científica que harán que Tagua Tagua recorra el mundo.

El equipo compuesto por arqueólogos, paleontólogos, geólogos y biólogos, entre otros, es la continuación de las primeras investigaciones arqueológicas iniciadas en la década del 60, que hoy cobran vida en este proyecto liderado por la Universidad de O’Higgins, en colaboración con la Universidad Austral de Chile, la Pontificia Universidad Católica y la Ilustre Municipalidad de San Vicente de Tagua Tagua, y que además cuenta con el apoyo público-privado a través de organismos nacionales como CODELCO, la Fundación Añañuca, el Proyecto Asociativo Explora O’Higgins, e internacionales como la Fundación Palarq.

Científicos descubren tagua gigante que habitó la zona central de Chile hace 12.600 años

Fulica montanei es el nombre que investigadores de la Universidad de Chile dieron a una nueva especie de tagua gigante descubierta en la zona del valle del Cachapoal, localidad de la Región de O’Higgins donde hasta 1841 existió la Laguna de Tagua Tagua.

Una investigación liderada por Jhonatan Alarcón, investigador de la Facultad de Ciencias de la U. de Chile, permitió develar el misterio sobre la identidad de estos fósiles que por más de 30 años estuvieron resguardados en el Museo Nacional de Historia Natural, trabajo que fue publicado por la revista Journal of South American Earth Sciences.

El estudio que permitió el hallazgo comenzó con la tesis de pregrado de Jhonatan Alarcón, quien estudió los materiales de aves de las colecciones de los sitios Taguatagua 1 y Taguatagua 2, extraídos hacia fines de los 80 por el arqueólogo de la U. de Chile y Premio Nacional de Historia, Lautaro Núñez.

De acuerdo al investigador, los restos presentaban rasgos morfológicos que sugerían que se trataba de una nueva especie de tagua, más grande que las que conocemos hoy en la zona central de Chile. Esta hipótesis pudo ser comprobada después de una comparación detallada con huesos de otras taguas de Chile y del resto del mundo.

Jhonatan Alarcón señala que la identificación de esta nueva tagua fue realizada a partir de huesos tarsometatarsos de la pata izquierda de tres especímenes, los que permitieron la comparación con otras especies de taguas.

“Puede que dentro de los huesos que ya tenemos existan restos pertenecientes a la misma especie, pero como no tenemos un esqueleto asociado aún no estamos seguros”, precisa sobre la importancia de estos restos. Destaca, por otra parte, que es la primera especie de tagua extinta identificada para el Pleistoceno de Sudamérica y la primera ave extinta identificada en el Pleistoceno de Chile.

En base al estudio de estos huesos, la investigación pudo determinar que se trató de una tagua robusta, unos 20 a 30 centímetros más grande que las que habitan actualmente la zona central de Chile. “Está en el rango de tamaño que presentan taguas que viven en el altiplano, como la tagua gigante y la tagua cornuda, que son las más grandes que existen hoy. Estas especies miden entre 60 a 70 centímetros de largo, y pueden alcanzar entre los 2.1 a 3 kilógramos de peso. Podemos especular sus hábitos acuáticos, y que quizás era una tagua no voladora, porque en general las taguas más grandes vuelan muy poco o nada por su peso. Pero como no hemos identificado aún otras partes del esqueleto no podemos saber, por ejemplo, si tenían alas cortas”.

U. de Chile

Chile central en la Edad del Hielo

Los 12.600 años de edad estimada para esta ave están relacionados con el trabajo de datación realizado por el reconocido arqueólogo de la U. de Chile Julio Montané durante de la década de los ‘70, a quien se homenajeó con el nombre Fulica montanei dado a esta nueva especie. El trabajo de este investigador, quien realizó la primera excavación arqueológica del sitio de Taguatagua 1 en el año 1967, y de otros que continuaron el estudio de la zona, como Lautaro Núñez en los 80 y el Grupo de Investigaciones de Tagua Tagua en la actualidad, han permitido completar pieza a pieza el gran rompecabezas ecosistémico de la antigua Laguna de Tagua Tagua durante el Pleistoceno tardío y el Holoceno temprano.

Esta zona lacustre, que fue desecada con fines agrícolas en 1841, a fines de la Edad del Hielo era una de las zonas con mayor diversidad de fauna y megafauna de nuestro país. Desde el 2019, Jhonatan Alarcón y Sergio Soto, ambos de la Universidad de Chile, junto a Rafael Labarca, de la Universidad Austral, e investigadores de otras instituciones han realizado nuevas excavaciones en búsqueda de otros tesoros fósiles de este Chile central prehistórico, entre los que destacan los extintos gonfoterios (un tipo de mastodonte sudamericano emparentado con los elefantes actuales), caballos americanos y ciervos. Este trabajo ha sido impulsado por el Proyecto Registro fósil y Evolución de Vertebrados de la Universidad de Chile, dirigido por el profesor Alexander Vargas; el proyecto Tagua Tagua Milenaria, encabezado por la Universidad de O’Higgins; y el proyecto Fondecyt N°11170919 de la Universidad Austral, a cargo del profesor Labarca.

El investigador valora el hallazgo de esta nueva tagua además porque es el primer registro de fauna menor que se extinguió.

“Gran parte de la fauna fósil está presente actualmente en la zona central de Chile, pero la megafauna como los gonfoterios, ciervos y caballos ya no están. Esta diversidad de animales abarcaba a una multiplicidad de aves, como águilas, otros tipos de taguas, patos y una gran variedad de paresiformes, además de roedores de varios géneros, reptiles, serpientes, anfibios, invertebrados y peces de agua dulce, entre otras especies”, explica.

Describe además que la Laguna de Tagua Tagua llegó a tener bastante profundidad y estuvo rodeada de una amplia y frondosa vegetación asociada a un clima más húmedo, frio y lluvioso que el que puede observarse hoy, lo que ha sido estudiado por otros investigadores en base al registro de polen. Por otra parte, agrega que está comprobada la presencia humana cohabitando con animales en este entorno.

“Hay mucha evidencia de presencia humana en la zona. Hay piedras talladas, puntas de flecha, y otros tipo de objetos manufacturados por humanos, así como huesos de animales como caballos, que tienen marcas de corte por herramientas de piedra”, afirma.

Respecto a la desaparición de esta tagua gigante y de especies de la megafauna que vivió en este lugar, Alarcón afirma que la incógnita aún está abierta.

“No sabemos la razón de su extinción. Justo en ese momento estaba ocurriendo la transición hacia un clima más cálido, como el que se ve hoy en nuestra zona central. Probablemente puede haber sido por el cambio climático o por la acción humana, sobre todo si era un ave no voladora y pesada que talvez era fácil de atrapar. Pero aún no tenemos evidencia suficiente que nos permita aventurar una hipótesis”.

Científicos descubren una gigantesca ave extinta hace 12 mil años que habitó la zona central de Chile durante la Era del Hielo

A 8 kilómetros de San Vicente de Tagua Tagua, en el valle del Cachapoal, Región de O’Higgins, hace 12.600 años existió una gran laguna. Con 13 kilómetros de largo, y rodeada de bosques con árboles frondosos, en el lugar habitaron diversos animales. Es considerado el sitio que albergó la mayor diversidad de fauna y megafauna para fines de la Edad de Hielo en nuestro país.

Ahora, un nuevo estudio en la zona permitió descubrir una gigantesca ave extinta hace 12 mil años. se trata de una nueva especie de tagua (grupo de aves acuáticas que también incluye a los pidenes y tagüitas).

El trabajo, titulado “Los rálidos del Pleistoceno tardío-Holoceno temprano (Gruiformes: Rallidae) de la Formación Laguna de Tagua Tagua, Chile central, con la descripción de una nueva tagua gigante extinta”, fue publicado en la revista Ciencias de la Tierra de América del Sur (Journal of South American Earth Sciences).

Desde que comenzaron los trabajos de investigación en Tagua Tagua, los científicos han encontrado piezas que explican cómo era el antiguo Chile de la zona central y la fauna que lo habitaba en el período Pleistoceno tardío-Holoceno temprano.

En el lugar, habitaron diferentes especies, hace más de 12 mil años.

La investigación de este hallazgo comenzó con Jhonatan Alarcón, autor principal y miembro de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile, quien realizó su tesis de pregrado con los materiales de aves de las colecciones de los sitios Taguatagua 1 y Taguatagua 2, excavados por el arqueólogo Lautaro Núñez en los años 80.

“Identificamos una especie nueva a partir de tres huesos de la pata. Son tres tarsometatarsos de la pata izquierda que estaban en la colección de paleontología de vertebrados del Museo Nacional de Historia Natural”, señala Alarcón.

El arqueólogo Rafael Labarca, académico de la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile, sede Puerto Montt, participó de la investigación, explicó que la nueva especie de tagua (Fulica montanei), debe su nombre al destacado arqueólogo nacional Julio Montané, quien realizó la primera excavación arqueológica en el sitio de Taguatagua 1 en el año 1967.

Labarca dice que se sabe muy poco. “No hay un esqueleto completo como para saber su forma o la proporción de las alas”.

“Era de un tamaño grande, no gigantesca. Similar a una tagua que vive en la actualidad en el altiplano, la tagua cornuda. Para Chile central, era más grande que las taguas que habitan hoy en esa zona”, añade Labarca.

Extenso trabajo de investigación

Durante mucho tiempo los fósiles quedaron en una especie de limbo, porque había rasgos morfológicos que sugerían que se trataba de una nueva especie, pero que se requería de una comparación detallada con los huesos de todas las otras taguas de Chile.

Pero Jhonatan Alarcón sospechaba que se trataba de una especie más grande a las que hoy habita la zona central del país..

“Es la primera especie de tagua extinta identificada para el Pleistoceno de Sudamérica, y la primera ave extinta identificada en el Pleistoceno de Chile. Los huesos se hallaron hace 30 años en excavaciones en San Vicente de Tagua Tagua lideradas por el arqueólogo Lautaro Núñez (los tres huesos pertenecen a 3 individuos distintos)”, explica Alarcón.

Los huesos estaban almacenados en el Museo de Historia Natural, venían de estas excavaciones que realizó el arqueólogo Lautaro Núñez a fines de los 80, en los sitios arqueológicos del lago Tagua Tagua 1 y 2. “No habían sido analizados, hasta que Jhonatan hizo su tesis de pregrado en 2015, y encontró que las formas del hueso, no correspondían a ninguna otra tagua conocida, al menos en Chile”, explica Labarca.

“El trabajo fue apoyado por el proyecto Anillo act172099 dirigido por el profesor Alexander Vargas y también por el proyecto “Tagua Tagua Milearia” de la U de O’Higgins”, añade Alarcón.

Los científicos estiman que era una especie que probablemente no era muy buena para volar, como todas las taguas de gran tamaño y que tenía hábitos acuáticos como todas las taguas.

Es difícil saber si se pueden encontrar especies nuevas, “porque nosotros hemos encontrado en los sitios arqueológicos de Tagua Tagua muchas especies de animales, pero que habitan en la actualidad en el lugar o sectores cercanos”, señala el académico de la Uach.

“Descontando animales grandes, como ciervos o caballos, esta es la primera ave extinta que se identifica en Tagua Tagua, y con esta antigüedad no habían descritas otras especies de aves extintas”, añade Labarca.

Arqueología y Patrimonio a través de la UACh

El patrimonio arqueológico del sur austral de Chile constituye un reservorio de experiencias, conocimientos y claves existenciales de los caminos que nuestros antepasados/as han sorteado y que explican nuestro presente. No meros objetos, el paisaje andino, las redes fluvio-lacustres, la tierra y el mar son el espacio vital donde nuestra historia se halla inscrita, el lugar donde podemos leer, imaginar, restituir e interpretarla a partir indagaciones y preguntas sobre este devenir de más de 14.000 años.

La historia de América ha reservado un capítulo espacial para los territorios meridionales de nuestro continente y quienes trabajamos en reescribir estos pasajes y dudar de las convicciones historiográficas y arqueológicas modernas, sabemos que en los difíciles momentos que nos toca enfrentar, debemos volver sobre las experiencias legadas y las memorias materiales que no en vano constituyen el centro del pensamiento arqueológico y ventana privilegiada a nuestro pasado. 

Desde su fundación, la Universidad Austral de Chile ha valorado el desarrollo de las humanidades y ciencias sociales. Como consta en 1964, el Rector don Félix Martínez Bonati inauguró el Centro de Estudios Históricos y Arqueológicos, unidad precursora del Departamento de Estudios Históricos y Antropológicos y de la Dirección Museológica. En vísperas del 66° Aniversario de nuestra Universidad, merece ser honrado y reconocido el compromiso público en la labor formativa, de estudio y transmisión del conocimiento, liderada por generaciones de profesionales responsables de la gestión del patrimonio arqueológico, su preservación y apropiación de su valor por parte de la ciudadanía.

Por décadas nuestra Universidad ha impulsado y apoyado la instalación de museos y centros de interpretación patrimonial; ha implementado instancias de difusión que han fortalecido redes y vínculos con las comunidades y ha jugado un papel clave en el diseño y ejecución de programas de puesta en valor del patrimonio. En 2019 ha creado la carrera de Arqueología en su Sede Puerto Montt, capital de la región de Los Lagos y nodo de la macroregión Patagónica, remarcando su compromiso amplio con el bienestar general de la sociedad austral mediante el genuino reconocimiento de nuestro pasado milenario.

Simón Urbina A.
Director Escuela de Arqueología
Universidad Austral de Chile
Sede Puerto Montt

Tercera sesión de diálogos en línea “Arqueologías desde el Sur” abordará la relación humano-animal

La Escuela de Arqueología y la Dirección Museológica de la Universidad Austral de Chile invitan al tercer ciclo de diálogos en línea “Arqueologías desde el Sur”, iniciativa donde se presentan distintos temas e investigaciones del cono sur de América en un contexto de divulgación y amistad. El ciclo está compuesto de 8 sesiones, las cuales se llevan a cabo todos los viernes a las 18:30 horas (GTM-4), continuando el 4 de septiembre.

En esta tercera charla se abordará la relación humano-animal desde la perspectiva arqueológica de la mano de la Dra. Isabel Cartagena, Arqueóloga de la Universidad de Chile, y Horacio Chiavazza, Doctor en Antropología, Licenciado en Historia, Magíster en Arqueología Social de Iberoamérica y profesor de la Universidad Nacional de Cuyo.

El Director de la Escuela de Arqueología de la UACh (Sede Puerto Montt), Simón Urbina, explicó que con las distintas presentaciones se busca convocar a variados tipos de públicos, desde estudiantes a profesionales e investigadores del área. “En ‘Arqueologías desde el Sur’, nos concentraremos en una discusión de carácter interdisciplinario, y revisar los encuentros que tiene la arqueología con otros campos del conocimiento y del hacer en campo cultural y patrimonial. Por lo mismo, esperamos además que asistan las y los colegas sudamericanos que sabemos están hoy accediendo a contenidos y avances de investigación como nunca debido a la enorme oferta de ciclos, charlas y talleres de arqueología que hay en todo el mundo. Nuestra expectativa es generar redes con las/os participantes y posicionar el trabajo que hacemos desde la Escuela de Arqueología y la Dirección Museológica de la Universidad Austral de Chile”, indicó.

Para participar solo es necesario enviar un correo a charlas.arqueologia.uach@gmail.com, donde se entregará el ID de Zoom, o también es posible ver la transmisión en vivo en el Facebook Live de @museosaustral

Sobre los expositores

Dr. Horacio Chiavazza

Entre sus líneas de trabajo se encuentran diferentes áreas de interés, destacándose las de estudios en tierras bajas y áridas y de arqueología urbana e histórica (desde 1995), por lo cual gran parte de su labor se ha concentrado en espacios urbanos, y en concreto, el de la ciudad de Mendoza, con énfasis en la articulación de obras de recuperación patrimonial, investigación y puesta en valor (por ej. Ruinas de San Francisco, Iglesia de La Merced, Escuela Mitre, Museo Fader, Memorial de la Bandera, Mansión Stoppel, entre otros). Dirige un equipo que se especializó crecientemente en análisis de materialidades de tiempos históricos, dirigiendo así más de 10 tesis de licenciatura y seis de doctorado. Recientemente lideró los trabajos de evaluación de impacto, diagnóstico, investigación y puesta en valor de Casa de San Martín en la ciudad de Mendoza. En cuanto a la experiencia en este tipo de labores se destaca el trabajo en Santa Cruz de la Sierra la vieja (Bolivia), entre 2004 y 2007. Fue parte del proyecto de excavaciones en La Misión, Valdivia (Chile, 2013). Actualmente es co-director del proyecto de investigación realizado en las ruinas del KM75 o Ciudad de Concepción del Bermejo en Chaco desde la Universidad Nacional del Nordeste.

Dra. Isabel Cartagena

Arqueóloga, Universidad de Chile. Doctora en Geschichts-und Kulturwissenschaften (Altamerikanistik), Freie Universität Berlín, Lateinamerika Institut, Alemania (Altamerikanistik comprende etnología, lingüística y arqueología americana). Es académica en la Universidad de Chile del Departamento de Antropología y efectúa docencia de pregrado como de magíster.

Ha estudiado conjuntos faunísticos de grupos cazadores recolectores hasta la consolidación de las prácticas pastoriles en el Norte Grande. Su trabajo ha explorado la relación entre los grupos humanos- los recursos animales y cambios medioambientales, como también el impacto que tuvo para los grupos humanos el proceso de domesticación de camélidos. Sus investigaciones actuales se focalizan en las ocupaciones tempranas de las cuencas altoandinas ubicadas en el centro-sur del desierto de Atacama.

También ha investigado los conjuntos de fauna finipleistocénicos que fueron cubiertos por el mar tras el Último Glacial Máximo y las trayectorias tafonómicas de los restos óseos sumergidos a través de equipos multidisciplinarios con el fin de comprender los procesos de formación, la localización y preservación de sitios ahora cubiertos por el mar. Participó en 2016 de la creación de ARQMAR (Centro de Investigaciones en Arqueología Marítima del Pacífico Sur Oriental) junto otros profesionales, buscando fortalecer la investigación científica interdisciplinaria en el ámbito de la arqueología marítima. Investigaciones recientes también comprenden el estudio de fauna histórica, ahora sumergida en el puerto de Valparaíso.

Ciudades para la arqueología del futuro

Las ciudades son uno de los temas preferidos de la arqueología: perdidas y en ruinas, ocultas en la selva o cubiertas por metros de arena, son el escenario predilecto de esta ciencia histórica y antropológica. Las más antiguas, protagonistas de la llamada revolución urbana, aparecieron en distintos puntos del globo hacen más de 5000 años, pero cientos de otras fueron fundadas y abandonadas en un proceso que concita regularmente la atención del mundo científico y que hoy cobra vigencia al preguntarnos por el destino incierto de nuestras actuales ciudades: ¿las abandonaremos?, ¿seguirán creciendo hasta hacerse inviables?

Las tradiciones urbanas de todos los continentes varían entre sí y que cada modelo de ciudad depende de la sociedad que las produce y habita. Nuestras ciudades actuales son herederas de elementos ancestrales (milenarios y centenarios): su emplazamiento en confluencias o desembocaduras de ríos, el uso del damero, la disposición de las plazas y zonas residenciales periféricas que reciben a familias migrantes. Al constituirse en espacios de reunión de la diversidad social y cultural, la ciudad se transformó en crisol de desigualdad, donde conviven privilegios y pobreza; multietnicidad y segregación barrial por ocupación y estatus. Las ciudades han permitido vertebrar los territorios nacionales actuales y mejorar las condiciones de vida, pero los bajos niveles de planificación, el confinamiento de las teorías urbanísticas a los espacios académicos y la transacción aparentemente libre de terrenos en el mercado, han permitido que desigualdades urbanas se transformen en inequidades territoriales extendidas una fuente permanente de conflictos y desafíos para las políticas públicas y la investigación del futuro.

En Chile, las investigaciones arqueológicas han probado que, como en el resto de América, las principales ciudades hispanas fueron fundadas en territorios densamente poblados y con asentamientos habitados muchos siglos antes: Arica, La Serena, Santiago, Concepción, Villarrica, Valdivia, Osorno, Castro. Aunque las actas de los cabildos llamaban ciudades a núcleos que constituían inicialmente pequeñas villas o precarias aldeas, cabe recordar que las dos oleadas fundadoras de mediados del siglo XVI y XVIII establecieron la fisonomía de nuestra red urbana moderna. Hoy, según las estimaciones recientes del INE (2019) seis regiones entre Valparaíso y la Araucanía superan el millón de habitantes y más del 88% de la población chilena habita en ciudades cuyas capas arqueológicas superficiales transitamos cotidianamente.

En el último siglo, mientras la red ferroviaria estatal que articulaba desde Arica a Puerto Montt se transformó mayormente en un artefacto arqueológico, la concentración poblacional en las áreas metropolitanas de Santiago, Valparaíso y Concepción ha seguido su curso inexorable articuladas ahora por amplias carreteras concesionadas. Como ha planteado la consulta “cambiemos el mapa” de la Corporación Ciudades ¿ha llegado el momento de poner límites al crecimiento urbano?; ¿es el momento de pensar en redistribuir la población del país y fundar nuevas ciudades? Puesto que los efectos del centralismo, la segregación, el hacinamiento, las crisis climáticas, sociales y sanitarias nos imponen imaginar colectivamente nuestras ciudades del futuro, debemos transformar nuestra arquitectura tributaria y económica desconcentrando el poder político y el modo en que ocupamos nuestro territorio.

Comienza segundo ciclo de diálogos en línea “Arqueologías desde el Sur”

La Escuela de Arqueología y la Dirección Museológica de la Universidad Austral de Chile invitan al segundo ciclo de diálogos en línea “Arqueologías desde el Sur”, iniciativa donde se presentarán distintos temas e investigaciones del Cono Sur de América en un contexto de divulgación y amistad. El ciclo está compuesto de 8 sesiones, las cuales se llevarán a cabo todos los viernes a las 18.30 hrs. (GTM-4), comenzando este viernes 21 de agosto. En la primera sesión se generará un diálogo en torno al trabajo en metales en la cultura Mapuche desde la mirada de una Retrafe (Celeste Painepan) y un arqueólogo especializado en metalurgia prehispánica (Roberto Cambell).

El Director de la Escuela de Arqueología, Simón Urbina, explicó que tras el ciclo de charlas realizado durante el primer semestre se pudo apreciar un gran interés, no solo de pùblico especializado, sino también de estudiantes y personas que querían conocer y adentrarse en estas temáticas. “Luego de una evaluación interna y una encuesta con asistentes al primer ciclo, hemos adoptado un formato de ‘diálogos’ con dos invitados en donde se exponen miradas y perspectivas de trabajo a ciertos temas que son de interés conocer para la comunidad que sigue temas arqueológicos en el sur austral de Chile. La interacción con el público y entre las/os invitadas/os será mayor”, señaló.

De igual forma, Urbina aclaró que este nuevo ciclo apunta a dar pie a una conversación entre formas de trabajo y experimentación con esta materialidad en una esfera mucho más amplia que la arqueología propiamente tal, por lo cual convoca a una audiencia más diversa y amplia. “Nuestras expectativas son abrir al conocimiento y discusión ciudadana cuestiones relativas a nuestra historia cultural. Sabemos que, en estos tiempos de conexión a distancia, hemos alcanzado personas, familias y colegas en distintos continentes, pero si bien nos interesa que parte de esos 1.600 asistentes al primer ciclo vuelvan a participar; sería un gran logro si podemos convocar a mayor cantidad de estudiantes y profesoras/es de enseñanza básica y media que valoran sus identidades, historias y lugares de pertenencia. En tanto actividad académica, también esperamos que asistan las y los colegas sudamericanos que sabemos están hoy accediendo a contenidos y avances de investigación como nunca debido a la enorme oferta de ciclos, charlas y talleres de arqueología que hay en todo el mundo. Nuestra expectativa es generar redes con las/os participantes y posicionar el trabajo que hacemos desde la Escuela de Arqueología y la Dirección Museológica de la Universidad Austral de Chile”, indicó.

Por su parte, el Director de la Dirección Museológica, Marcelo Godoy, relevó la importancia de este tipo de actividades ya que invitan a una discusión de carácter más interdisciplinario. “En esta segunda etapa de ‘Arqueologías desde el Sur’,  nos concentraremos en una discusión de carácter más interdisciplinario, es decir, nos gustaría poder revisar los encuentros que tiene la arqueología con otros campos del conocimiento y del hacer en campo cultural y patrimonial. Nos parece una excelente oportunidad para que podamos revisar un conjunto de experiencias que tienen que ver con esta dimensión interdisciplinaria en el entendimiento de las temáticas patrimoniales, históricas, arqueológicas presentes en nuestro territorio”, manifestó.

Asimismo, Simón Urbina se refirió al trabajo colaborativo entre estas unidades, destacando cómo ambas comparten el trabajo con el patrimonio cultural e histórico de Puerto Montt y Valdivia, y las regiones donde estas ciudades se encuentran. “Con las/os colegas de la Dirección Museológica trabajamos en investigación aplicada, publicaciones, educación patrimonial y apoyo a la institucionalidad pública (p.e. Consejo de Monumentos y Museos Estatales y Municipales). En el futuro, en un proceso de articulación que se está iniciando, este vínculo debiese permitir a nuestras/os estudiantes de Arqueología desarrollar sus prácticas y tesis de pregrado aprovechando las capacidades y colecciones científicas que nuestra Universidad posee en sus distintos museos y laboratorios tanto en Pelluco (Puerto Montt), Frutillar y Valdivia”, especificó.

Simón Sierralta, encargado del Laboratorio de Arqueología de la Dirección Museológica UACh, destacó el trabajo colaborativo que se ha desarrollado desde esta área con la Escuela de Arqueología por medio de la realización de las charlas, donde ha participado tanto como expositor y moderador de estos espacios. “Organizar y participar de estas charlas y diálogos nos ha permitido entrelazar distintas perspectivas y realidades sobre el trabajo arqueológico, abriendo un espacio de interacción distinto al que estamos acostumbrados. Además, es muy grato saber que hay un interés tan amplio, de personas de todas las edades y orígenes, sobre estos temas que nos hacen reflexionar sobre nuestras historias comunes. Sin duda una de las enseñanzas que nos dejado esta pandemia es que, pese a las dificultades, hay formas de dialogar y aprender en una escala que quizás antes no habíamos explorado tanto”, señaló.

Si bien para el primer ciclo de charlas se contó con la participación de profesionales e investigadores internacionales, para esta nueva versión los diálogos incluyen invitadas/os muy destacados de Argentina, con lo cual se busca perfilar este segundo ciclo como diálogos binacionales, elemento que resulta clave para las ciencias sociales y la arqueología en el Cono Sur de América.

Para participar solo es necesario enviar un correo a charlas.arqueologia.uach@gmail.com o también es posible ver la transmisión en vivo en el Facebook Live de @museosaustral

Patrimonio arqueológico de Los Lagos será el protagonista del próximo diálogo “Conectemos con los monumentos”

“Arqueologías desde el sur austral de Chile: avances y desafíos” es el título del tercer encuentro del ciclo de diálogos sobre patrimonio local “Conectemos con los monumentos”, organizado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a través de la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) y apoyado por la Universidad Austral de Chile, por medio de la Sede Puerto Montt.

El encuentro se realizará el jueves 20 de agosto, a las 18.30 horas, a través del canal de YouTube y Facebook del CMN y contará con la participación de Paulina Concha Ferrada, SEREMI de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Los Lagos; Alejandra Vidal, arqueóloga, consejera del CMN y representante del Colegio de Arqueólogos de Chile; Simón Urbina, arqueólogo y doctor en Historia, Director de la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile, y Sandra Ranz, antropóloga, encargada de la Oficina Técnica Regional (OTR) del Consejo de Monumentos Nacionales, del Servicio Regional del Patrimonio Cultural, quien moderará la actividad.

El valor patrimonial arqueológico de la región sobresale por las tempranas evidencias asociadas al poblamiento americano, correspondientes a los sitios arqueológicos Monte Verde II y Chinchihuapi I, que revelan la presencia humana al menos 14.500 años atrás. El primero se destaca -a nivel nacional e internacional- por su excelente estado de conservación, preservándose restos como madera, cordelería, huesos y piel, entre otros. Se suman, además, las evidencias paleontológicas encontradas en el sitio Pilauco, Osorno, donde se encontraron restos de un gonfoterio, entre otros importantes hallazgos.

Asimismo, y en la porción meridional de la región, destaca la amplia presencia de vestigios arqueológicos asociados al litoral del mar interior, donde desde hace al menos 6 mil años es posible advertir una progresiva adaptación cultural al ambiente boscoso-marítimo. Estas evidencias se traducen en la existencia de cientos de conchales arqueológicos repartidos en las costas tanto continentales como insulares, a raíz de ocupaciones de cazadores-recolectores costeros y luego, por grupos alfareros. Entre el seno de Reloncaví y el mar interior de Chiloé sobresale además la alta presencia de trampas para peces, denominados corrales de pesca, una técnica indígena que sobrevive hasta hoy, y cuya presencia se estima en al menos mil estructuras repartidas en la región.

“Esta instancia es una invitación abierta a la ciudadanía no solo de la región sino también de otras partes para conocer y acercarse al patrimonio arqueológico de la Región de Los Lagos que da cuenta de la forma de vida de los primeros habitantes del área sur andina. Se profundizará sobre cómo las poblaciones se adaptaron a los bosques y mares australes, un tema que no ha sido muy estudiado hasta ahora, en una conversación donde el conocimiento científico y la educación patrimonial serán protagonistas”, comentó la SEREMI de las Culturas de Los Lagos, Paulina Concha Ferrada.

A su vez, el secretario técnico del CMN, Erwin Brevis, destacó que el reforzamiento de la dotación profesional en la Región de Los Lagos ha robustecido el despliegue territorial desde la institucionalidad cultural. “El trabajo conjunto entre el CMN y la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral será muy importante para generar un fuerte impulso a la investigación y a la protección del patrimonino arqueológico del territorio sur austral”, precisó.

El encuentro “Arqueologías desde el sur austral de Chile: avances y desafíos” se realizará el jueves 20 de agosto a las 18.30 horas en para Chile continental, 19.30 Magallanes y 16.30 Rapa Nui. Se transmitirá vía YouTube y Facebook del CMN https://www.youtube.com/watch?v=sZyFQq75hyo

Ciclo de diálogos “Conectemos con los monumentos”

Las sesiones se realizarán cada jueves y son organizadas por una de las 16 Oficinas Técnicas Regionales (OTR) y dos provinciales (Chiloé y Rapa Nui) de la Secretaría Técnica del CMN, las que por primera vez tienen presencia en todo el territorio nacional. Colaboran en el ciclo de diálogos 14 universidades regionales a través de la participación de un/a académico/a junto a consejeros y consejeras del CMN con destacadas trayectorias en distintas disciplinas. En algunos encuentros también expondrán Premios Nacionales, como Lautaro Núñez, arqueólogo y Premio Nacional de Historia en 2002, de Antofagasta; Sergio González, historiador y sociólogo, Premio Nacional de Historia 2014, de Arica; y Edward Rojas, arquitecto y Premio Nacional de Arquitectura 2016, de Castro.

Los diálogos se sucederán desde sur a norte, totalizando las 16 regiones. Será una instancia propicia para conocer la particularidad de cada territorio, desde la experiencia local y considerando la mirada académica.

La convocatoria es abierta para todos quienes deseen participar, a través del canal de YouTube y Facebook del Consejo de Monumentos Nacionales.