En Chile central, el registro fósil de fauna del Pleistoceno tardío (20 mil a 12 mil años atrás) es abundante: existen cerca de 32 sitios paleontológicos y arqueológicos dispersos a lo largo de este territorio tanto en costa, depresión intermedia como precordillera. Pero ninguno de estos sitios tiene parangón con Tagua Tagua: el sitio que albergó la mayor diversidad de fauna y megafauna para fines de la Edad de Hielo en nuestro país y que ni ayer ni hoy tiene un símil comparable.
Esa es la conclusión del estudio interdisciplinario del Núcleo Tagua Tagua, publicado en la revista Quaternary Science Reviews, donde por primera vez se hace un catastro, análisis e identificación de todos los registros fósiles encontrados en la zona -ubicada en la Región de O’Higgins- y que concluyó con la identificación de 28 especies (taxones) diferentes que incluyen moluscos, peces, anuros (ranas y sapos), reptiles, aves, roedores, mastodontes (gonfoterios o elefantes prehistóricos), caballos y cérvidos, lo que convierte a Tagua Tagua en el sitio más rico del Pleistoceno tardío (20 a mil a 12 mil años) de Chile hasta el momento.
La mayoría de estas especies siguen viviendo actualmente en la misma zona, otras restringieron su hábitat por cambios en el clima y otros -mastodontes, caballos y cérvidos- desaparecieron al finalizar la “Edad de Hielo”, lo que demuestra que la extinción masiva de especies que ocurrió en el mundo hace 10 mil años solo afectó a la megafauna o grandes animales, cazada ampliamente por los primeros humanos.
A 8 kilómetros de San Vicente de Tagua Tagua, en el valle del Cachapoal, Región de O’Higgins, hace 12.600 años existió una gran laguna: tenía una figura elíptica de unos 13 kilómetros de largo y estaba rodeada de bosques con árboles frondosos que daban refugio no sólo a diversos animales, sino que a los primeros grupos de humanos que habitaron el país y que encontraron allí su alimento.
Rafael Labarca, académico de la Universidad Austral y líder de la investigación en la que participaron 11 científicos indica que, aunque estudios previos daban cuenta que Laguna de Tagua Tagua (drenada artificialmente en el siglo XIX) fue un sitio de gran diversidad de fauna, no existía hasta ahora un registro y análisis fósil detallado como el actual, que abarca todas las excavaciones y hallazgos hechos en la zona que tienen una datación de 20 mil a 12.600 años.
“Lo que muestra este estudio es que hay una diversidad de especies enorme y que es propia de ecosistemas lacustres. No sólo había mastodontes y megafauna caminando por el área, sino que mucha fauna pequeña que se conserva hasta hoy en el territorio nacional. El estudio revela, además, los cambios climáticos que se dieron en ese tiempo (fin de la Edad de Hielo o Pleistoceno tardío y época actual (Holoceno), donde se pasa de un período frío a uno más mediterráneo. Eso se ve en los fósiles, ya que algunos animales hallados son propios de zonas húmedas, boscosas o semiáridas actualmente”, dice.